La consigna consiste en realizar el análisis de una situación particular en cuanto a la Comunicación, el Liderazgo y la Dinámica Grupal desde el punto de vista institucional.
La dimensión institucional de la comunicación se interpreta como la interrelación de los distintos estamentos dentro de la organización. En esta instancia se distingue la comunicación formal y la informal.
Por el tipo de trabajo que realizo (docente universitaria viajera) tengo muy pocos contactos con los distintos niveles de dependencia. La comunicación formal es vertical y descendente tradicional en el nivel coordinación regional y comunicación ascendente en el nivel de coordinación de carrera que permite generar proyectos, planificar, organizar, ejecutar, evaluar, ajustar y solucionar problemas de manera conjunta con espíritu crítico y reflexivo y creatividad.
En cuanto a los niveles de actividad del grupo, en el cuarto nivel (afectivo) existe una delicada y muy compleja red en la que interactúan fuerzas de carácter emotivo y sentimental.
La coordinadora de carrera es una fuente de autoridad formal, técnica y moral. Sus conocimientos (competencias para actuar) y habilidades comunicacionales y pedagógicas le aportan el sustrato de su poder legítimo y de experto. Tiene poder y autoridad o sea que se trata de un líder formal e informal. Su estilo es democrático en cuanto a la búsqueda de consenso en las decisiones y la participación y productividad homogénea (con o sin su presencia); en ciertas ocasiones suelen presentarse conflictos con algunos miembros y su estilo de conducción puede tener algún rasgo autoritario.
La distancia entre los agentes de comunicación prácticamente no existe porque la información no pasa por intermediarios, es directa a la coordinadora de carrera y, de esta manera se evitan distorsiones propias de su paso por muchas personas. Las comunicaciones relacionadas a la tarea, las estrategias a seguir y la imprescindible retroalimentación la efectuamos a través de los canales habituales de comunicación y se realizan reuniones para consensuar los pasos a seguir en determinadas tareas específicas.
En cuanto a la dinámica intento diferenciar cuatro niveles de actividad:
- I Temático: comprende el desarrollo de los objetivos coyunturales, explícitos e inmediatos y hace referencia a todo lo que se habla y a la tarea, material o no, que se realiza. Se trata de un nivel superficial que, como se relaciona con la tarea es atendido en forma inmediata y se le otorga prioridad.
- II Funcional: tiene carácter instrumental, corresponde a la interacción neta e incluye la fase de organización grupal. Podría considerar que está conformado básicamente por los docentes, la coordinadora docente y el apoyo técnico. En este sentido las personas que más intervienen son la coordinadora y el apoyo técnico. El resto de los docentes participamos menos. Decide el líder pero busca consenso. El lenguaje corporal y el tono de voz están condicionados por la presencia de docentes de otras carreras ya que se comparte una recepción común para todos. Presto mucha atención a este nivel, si bien es instrumental marca las pautas de cómo es visto cada uno y cómo vemos a los demás a través de la mirada, hacia quién va dirigida la conversación, si es en plural o singular (de ser así la mirada indica quiénes quedan fuera de una charla en la que, por ahí, uno pensaba que tenía para aportar). Este nivel es muy rico y más aún si tenemos en cuenta la interdependencia y estratificación de los niveles, por ejemplo: extrapolaciones del nivel II al IV (que tiene que ver con los afectos)
- III Cognitivo: hace referencia a las cogniciones de sus integrantes. Aquí se pone en juego lo que cada uno piensa, percibe, siente, valora, razona a medida que el grupo va funcionando y en él se dan los procesos socio cognitivos básicos (se compara, se atribuye, se categoriza) Hay quienes somos más sensibles para interpretar inferencias, expectativas, intereses, aspiraciones de los otros, más allá de que no lo manifiesten con palabras (ya sabemos del escaso impacto de la palabra (7%) en el mensaje que transmitimos)
- IV Afectivo: hace referencia a lo que cada uno vivencia y siente. Este nivel permanece más oculto que los anteriores porque uno se centra en el nivel temático y, coyunturalmente, en los niveles funcional y cognitivo. Sin embargo es trascendente su importancia porque en él radica la gratificación y la satisfacción por pertenecer al grupo. De las relaciones de interdependencia entre las emociones y sentimientos de los miembros tales como amor, compenetración, agresividad, cólera, miedo, angustia, entre otros, surge el clima del grupo. En nuestro grupo en general prevalece la empatía, sin embargo, como es el producto de una red muy compleja, la percepción de la moral del grupo cambia en función de nuestras propias percepciones y de cómo se desarrollan las interacciones en cada encuentro.
Producción original elaborada por: GARCÍA, Elina E. Magíster en Educación Médica. Presentada en el marco del Seminario sobre Dinámica de Grupos, Comunicación y Liderazgo de la Maestría en Educación Médica de la Universidad Nacional de Tucumán.